“Construir un Puerto Montt que contribuya a un nuevo Chile”

Somos hijos de una tierra generosa, de la lluvia que cae al sur del mundo. Es una tierra bella y con una geología telúrica. Nuestra memoria guarda severos inviernos y veranos breves. Volcanes, montañas, senderos, viajes, el rostro de mujeres, hombres, pueblos originarios, que son parte del recuento de nuestra historia.

Dejamos atrás un siglo repleto de sueños, de aspiraciones de millones de seres humanos: la ilusión de un mundo mejor.

Soñamos nuestra ciudad con escaleras mecánicas que conecten las terrazas de nuestros vecinos. Con un autódromo seguro y apto para la competición. Una piscina temperada para impulsar los deportes acuáticos de los jóvenes. También para ser disfrutada por los niños y las personas con capacidades diferentes. Por nuestros adultos mayores. Una comuna  capaz de proyectar la actividad física a todos sus rincones a través de centros deportivos.

Nos ilusionamos con mercados y ferias modernas, que exhiban la riqueza de nuestro océano y de nuestra tierra.

Aspiramos a vivir en barrios amables, bellos, sustentables. Con ciclovías, áreas verdes e iluminación eficiente.

Con un manejo adecuado de sus desechos, con tenencia responsable de mascotas.

Sin embargo, aún no estamos en un mundo mejor. Permanecen los clásicos problemas de justicia social.

Emprendemos una administración colmada de aspiraciones justas, legítimas y bellas: una comuna para todos.

No es fácil responder a las autoexigencias. A las metas que nos hemos impuesto. Son extensas las aspiraciones de nuestros vecinos y vecinas.

Construir un Puerto Montt que contribuya a un nuevo Chile. Una herramienta cierta es la  educación. No es un bien de consumo. Por tanto, no es una mercancía: es un derecho.

Superar las dificultades históricas que ha escrito la injusticia social: la carencia y la adversidad que aplastan el porvenir.

Nuestra gestión es una tarea de todos. En nuestras manos está el edificar un Puerto Montt: solidario y justo. Tenemos la convicción de que se puede: de que es posible.

Construir un Puerto Montt que contribuya a un nuevo Chile. Una herramienta cierta es la educación. No es un bien de consumo. Por tanto, no es una mercancía: es un derecho.

Gervoy Paredes Rojas

Alcalde de Puerto Montt